Este es otro aspecto del que me gustaría hablarte, pues soy de los que agradece a Dios cada día por la vida que me ha otorgado. Por eso, les digo: Dedíquense a la Oración manteniéndose en agradecimiento.

Vivo en permanente contacto con la energía universal, profeso el agradecimiento como un símbolo de buen vivir y me mantengo agradecido por todas las cosas que he experimentado, por las que vivo y las que viviré. No me cierro a las oportunidades, porque sé que todo lo que sucede en mi vida está destinado para mí, por eso debo asumir cada experiencia con inteligencia y madurez, ya que lo importante es saber cómo superar las pruebas del día a día para ser mejor. 

La Oración es parte importante del camino espiritual del individuo pero siempre, dedíquense a la Oración manteniéndose en agradecimiento.

Comenzaré este apartado dándote mi apreciación de lo que es para mí el agradecimiento. Este, al igual que el amor es un sentimiento profundo desde el cual reconocemos algo que se recibe o simplemente algo que se da. Sin embargo, quiero que tengas presente que la gratitud no es lo mismo que la deuda moral.

Ciertamente, una cosa es gratitud, aquella que enaltece el gesto y otra es la deuda moral, entendida como el compromiso que adquieres por alguna bondad o favor recibido.