¿Cuánto sabes de tu verdadero propósito de vida?
Tal vez creemos que nuestro propósito de vida, es el mantenimiento y la multiplicación de la especie, preservar la subsistencia de todos los seres vivos en la tierra. Quizás, alcanzar el mayor bienestar económico, financiero y profesional, o tal vez, dejar huellas, que otros puedan seguir. Lo que, si es cierto, es que estamos aquí, con un firme propósito y sea cual sea, por el tiempo de nuestra existencia, debemos honrar a nuestro Señor.
Quizás has oído hablar del Código del Destino Genético y de la Misión de Vida. Permíteme y te explicaré.
Al momento de tu nacimiento, el Padre Creador te ha encargado una misión, sea cual sea y por el tiempo que sea. Llegas a la vida no por casualidad sino por causalidad. Hay quienes viven solamente hasta el momento de su nacimiento. Otros duran un poco más y hay muchos en los que su vida está limitada hasta cierto tiempo y tal vez te has preguntado ¿por qué?
Nacemos con un propósito de vida. Cuando crecemos escogemos el que creemos correcto. Luego, cuando maduramos, analizamos si estuvimos en lo cierto, o en lo incorrecto de nuestras vidas. Ciertamente, no podemos devolver el tiempo, pero si podemos mostrar a otros, que nuestros errores, pueden ser en el futuro, también los errores de ellos. Tal vez, aunque no pudimos predicar con el ejemplo, desearíamos desde lo más hondo del alma y del corazón, que nuestros seres amados, nunca se equivocaran, como nosotros en nuestros tiempos.
Trabaja desde hoy para obtener tu felicidad. Recuerda que la felicidad no es dinero, riquezas y lujos, todo es cuestión de actitud, de cómo llevas la vida y que hacer para lograr alcanzar todas y cada una de tus metas. Busca en ti, esa llama dorada, encuéntrala y sigue tu instinto. Sin embargo, lo que hagas, debes hacerlo con nobleza, honestidad y sobre todo, imprégnale pasión, así llegaras donde realmente te corresponde.